MECHICA

Mi Adorado Diego Ulises, eras mi nieto Huerfanito pero para mí, “Mi Adorado Hijo Chiquito”, 10 años disfrute de para mí de tu divina compañía, el destino que conmigo en muchas cosas ha sido cruel nos separó cuando en mi casa te dimos una cena de despedida a ti y a mi querido Fernandito en compañía de mi otro recién nacido príncipe “EMILIANO ANASTASIO”, aparentemente me viste muy feliz pero en realidad ya sentía en mi alma el frio de tu ausencia ya no iba a tener la felicidad de ayudarte de voladas con tus veinte dolaritos, Tu gran parecido físico con mi adorado hijo “Ulisitos mi chato”, era para mí un agridulce recuerdo que me hacía gozar y sufrir te veía hablar, te veía reír y eso me hacía recordar más a mi adorado hijo Tu Padre, recién e sabido que cada vez que necesitabas algo para ti que pudiera ser imposible le pedias al espíritu de tu padre dices que todo te lo concedía, eso me alegra de manera muy especial pues nunca lo olvidaste siempre a vivido en tu mente la última noche que estuvimos juntos me dijiste que en los EEUU ibas a estudiar y a trabajar, y que después económicamente me ibas a ayudar te lo agradezco en el alma mi querido nieto, pero la mejor ayuda que me puedes dar para hacerme muy feliz es ser un hombre honrado y trabajador un hombre de bien, como me han contado que hoy eres, un Pastor Evangélico un hombre de Dios, jamás olvidare el día que te hice rey mi príncipe dámele saludos cariñosos a tu madre, a Fer, y a mi princesita bella y humilde “Sofía”, la joven más elegante y bella orgullo de Santa Tecla, eternamente en mi mente vivirás mi adorado “Mechica”, fuiste mi herencia el regalo más preciado que mi hijo Ulises me dejo. F.Verga Vila “El guanaco”.