LA DESTRUCCION DE UN HOGAR abalancha de sufrimiento

La destrucción del hogar nos trae una avalancha imparable de sufrimientos por los recuerdos ya nuestra vida estaba hecha en mi casa mi hogar hera mi hijita muerta mi hijo Miguel mi hijita maria José y la madre  de ellos al quedar solos nos juntamos como pollitos huérfanos con frío ya no teníamos quien nos hiciera la comida ni quien nos labara la ropa a mis hijos en su cara les notaba la inmensa tristeza se les había desecho su forma de vivir aún que ya heran grandes pero la traición de su madre nos afectó en gran manera a todos como un gallo extendí mis alas para proteger a mis pollitos aunque de mucho no me sirvió porque a los siete años mi hogar sin mujer se me destruyó diferencias irreconciliables entre ellos surgieron y por más que trate no pude mantener unido mi hogar cada quien buscó su propia vida y sin ese hogar me quede la vida es así ella nos da y ella nos quita me quede sólo comiendo huevos duros y sopa maruchan todo por actuar mal, ella manifestaba a medio mundo que desde el día  que nos abandonó su vida fue un infierno tarde para arrepentirse nosotros también vivimos nuestro propio infierno.